Unas navidades normales

Hace mucho mucho tiempo...

Quizás parezca que todo aquello ocurrió hace mucho tiempo, pero las últimas navidades aún se celebraron bajo la preocupación del contagio, a pesar de que las vacunas vendrían en breve a liberarnos de la pandemia.

Y resulta interesante recordar estas circunstancias porque esta Navidad será la primera en la que las familias volverán a celebrar las fiestas de forma normalizada y no deja de ser curioso que el mayor regalo que podamos tener en estas fiestas sea precisamente “la normalidad”. Nunca se aprecia tanto la normalidad como cuando “lo normal” parece inalcanzable y estar juntos de nuevo con compañeros, amigos y familiares supone en sí mismo un motivo de celebración.

¡La Navidad a vuelto!

Este año han vuelto las cenas de empresa en las que celebrar junto a los compañeros de trabajo, han vuelto las risas y las anécdotas. Han vuelto las carreras callejeras para conseguir taxi. Han vuelto la masificación a las calles para disfrutar de las luces navideñas que adornan las principales calles comerciales y las familias disfrutando de los mercadillos navideños. Han vuelto las colas a las puertas de las más afamadas delegaciones de Lotería. Han vuelto las tiras de luces titilantes en los balcones. Los anuncios empalagosos de perfume y de champán.

Ha vuelto, en definitiva, la normalidad en estos días de final de año. Y todo habrá servido para, al menos, ser conscientes de la importancia de la normalidad, de lo valioso que es en nuestras vidas tener esos momentos habituales que no siempre valoramos en su totalidad.

Por eso mismo, este año tenemos que darnos todos esos abrazos que la pandemia nos robó y disfrutar de esos momentos de felicidad que la Navidad nos regala, junto a la familia, alrededor de una mesa. ¡Felices Fiestas! Y vuelvan a disfrutar de la normalidad de estar junto a las personas importantes en nuestra vida.